sábado, 17 de septiembre de 2011

La Chilenidad

No se me ocurrió qué imagen poner pa esta entrada... vueeeeeelta!



Ayer, mientras vestía a mi hija pal jardín, se dio este diálogo:

Ella: ¡Pero no quiero bailar cueca! (ella cree que por ponerse el traje de china DEBE bailar cueca)
Yo: No tienes para qué bailar cueca, solo ponerte el traje
Ella: ¡Pero tengo frío!
Yo: Allá estarás calentita
Ella: ¡Pero me aprietan los zapatitos!
Yo: Puta hija mía, que es difícil la chilenidad.


Por supuesto que tuve que vestirla igual, la directora del jardín no comprende la negativa de un niño y menos algo parecido a objeción de conciencia. El día anterior nos reunió para decirnos lo importante que era vestir a los niños con su traje, por los valores y blá.
 Y bueno, mi hija se fue alegando por los zapatos todo el rato, tanto que le mandé los de siempre para que se los cambiaran si era necesario.
La dejé en el jardín alegando y me fui, porque también la directora nos dijo que eran niños grandes y que había que dejarlos solos y bla.

Y me fui con mi viejo, todavía con un regusto amargo, porque a diferencia de otros días, mi hija no quedó contenta, no fue  a hacer sus edificios o revisar sus revistas, ella se quedó sentada, mirándose al espejo y a punto de llorar.



-Si yo fuera ella, también lloraría. Con la educación, la salud y la desigualdad de este país, es como para llorar- le dije a mi viejo mientras esperaba poder cruzar la calle.
-Sí, pero la gente entiende que esa es la forma de inculcarles a los niños el amor a la patria.



Y entonces me acordé de un párrafo de un libro que me leí hace aaños (y si ud. no lo ha hecho, hágalo.). El libro se llama "Gracia y el Forastero" . Como no lo tengo a mano y como no lo encuentro para bajarlo en ninguna parte (T.T), nada más queda relatar lo que me acuerdo.

Romero, el protagonista,(el forastero) acababa de conocer al novio de Gracia, un militar. Inmediatamente la rivalidad nació entre ambos. Más tarde, Romero pensaría que para hombres como el novio de Gracia, la patria eran los héroes, las batallas, las escarapelas y símbolos militares. Hombres como él pensaban que amaban a la patria y nadie lo hacía más que ellos, mucho menos los intelectuales.  Sin embargo él, Romero, amaba a su patria, pero su forma de amarla era distinta e igual de válida. Él amaba a la gente, los paisajes Chile, amaba la cordillera, salir de excursión, amaba su tierra de una forma que no implicaba matar por ella, si no vivir por ella.



Ya en mi casa, perdí 5 lucas por quedarme conversando con mi viejo sobre ese concepto medio ambiguo de la chilenidad.

A la mayoría de los chilenos les baja el amor por su patria en Septiembre.
Antes vivimos en un país de mierda, donde ser "buen chileno" es llegar atrasado a todo, hacer todo a última hora, saltarse la fila y cagarse al resto, no pagar las deudas y pedir condonaciones y emborracharse como imbécil en año nuevo para pasar la caña el 1° en el mercado central.
En el Chile de los otros 11 meses, el chaqueteo y la bipolaridad son pan de cada día, y se ven en extremos neuróticos cuando 11 sujetos juegan al fútbol y se les ocurre ganar. Entonces los chilenos somos bravos, somos los campeones, préstenos la copa y váyanse pa la casa que esto está cocinado y la sangre araucana nos hace no rendirnos nunca.
Apenas perdemos, somos lo peor del mundo, jamás seremos buenos, somos ratones, malos, somos un país cagón que cuando llueve un poco se inunda entero y la raza es la mala y por qué chucha no nos conquistaron los ingleses, ah? tenían que ser estos españoles de mierda y estos indios de mierda, borrachos más encima, tamos cagaos compadre, esta wea no va a cambiar nunca.

Y sin embargo, en Septiembre a todo el mundo la chilenidad le brota por los poros. La cueca es el baile más hermoso. Qué importa que ni la mitad de Chile la sepa bailar bien y que jamás se escuche en otro mes que no sea éste.  Las payas salen de cada conversación, el traje típico se lo ponemos hasta al perro (los gatos mantendrán siempre la dignidad). Nos atiborramos de empanadas y en todos los supermercados se escuchan los Fachos Huasos Quincheros cantando El Corralero, el Patito Chiquito (wevá más horrible que esa dónde?) y otras elegantes cuecas, Mi alma!
Y pa qué hablar de los noticieros, con importantes e interesantes notas sobre el mejor pino de las empanadas, cuántas calorías se consume en un almuerzo dieciochero o los borrachos que quedaron botados en las fondas ( a todo esto, me acordé de un año donde un tipo quedó botado toda la noche, y al otro día cuando lo fueron a despertar, estaba muerto.. bbrr. no sé por qué me acordé de esa wevá, momento morboso no más)

Pasado el 18 y la estupidez de ver a los milicos desfilando cagados de calor, el país volverá a ser lo que era. (odienme si quieren, pero  ES una estupidez que hagan esa wea y es infinitamente más estúpido verla.. gracias, señor, por el TV cable!)

Pensando en eso, me pregunté qué valores quería darle a mi hija.
me pregunté sobre todo, por qué la chilenidad, o el orgullo patrio se reduce a un fin de semana cagón en todo el año. Por qué ser chileno implica tener gastritis, emborracharse como bestia y hacer asados todo el día y vestirse con un trajecito carísimo que el 99% de los chilenos jamás usaríamos en otra fecha que no fuera ésta.

¿Por qué no les decimos a nuestros hijos cosas tan importantes y tan desconocidas o tan poco valoradas por el común de la gente, como el hecho de tener al ciervo más pequeño del mundo pastando en nuestros bosques del centro y sur? ¿Por qué no recordarles y que se sientan orgullosos de eso, que en nuestra cordillera vuela el ave voladora más grande? ¿Por qué no les decimos que se es chileno todo el año, que todo chileno tiene el deber de hacer de su país un lugar mejor, con gestos tan simples como dar las gracias,  respetar tu lugar en una fila de banco, cuidar tu naturaleza,  y defender a tu país cuando un extranjero desatinado se ponga a criticarlo?
(Se han fijado en esa wevá? gringo que viene y se queda por un tiempo, empieza a quejarse del país.. qué se creerán los weones patúos? Me acuerdo un gringo que escribió en su blog que los chilenos hablábamos como los marcianos de Mars attack y qué creen que hacían los chilenos?? le daban la razón wn!  creo que fui la única que le recordó que los chilenos hablábamos pa entendernos entre nosotros y nos funcionaba la raja, que si no le gustaba, bien podía el desatinado grande, guardarse su cagá de opinión y que si no le enseñaron a respetar los países que visitaba. Obvio que no, esos wns se creen dueños de la verdad y no cachan na de ná).

Y o sea, pa redondear la idea (que me fui por las ramas), por qué los valores de ser chilenos se los reducimos a nuestros niños a vestirse de un traje, escuchar una música que jamás escucharemos en todo el año y nada más?
Por que así, mientras miles de chilenos saldrán a embrutecerse en medio de un patriotismo chouvinista, habrá otros tantos chilenos que luchan por que este país sea mejor, de una forma  o de otra.

Y aunque nadie sepa ni quiera saber, aunque no salga en las noticias entre el relleno de empanadas o los extraños nombres de las fondas,  en este país hay, desde hace más de un mes, niños, adultos y ancianos, mujeres y hombres en huelga de hambre, que junto con cientos de  estudiantes en toma, pelean por algo que todo chileno debería pelear: hacer de este país un lugar mejor para todos, con algo básico como es la educación digna, de calidad, al alcance de todo el que pueda, el que quiera y sea capaz. Ellos creen en un cambio, aunque aún no han ganado nada, tienen una convicción que no se traduce en cuántos logros han tenido, porque hasta ahora han sido más que nada sacrificios. Ellos, esta nueva generación, cree que puede cambiar Chile, que lo puede hacer mejor.

Por supuesto que hay miles de luchas anónimas e igual de válidas, desde el paco que tiene que weviar este fin de semana pa que los borrachos de mierda no se maten (tanto), pasando por el auxiliar, la enfermera, el médico que se quedará a atender enfermos, así como los bomberos de turno, los barrenderos, los veterinarios (oh, señor, existimos y trabajamos! ). No seré yo quién desconozca eso.

Pero si Ud llegó hasta acá, se dio la paja de leer esto, recuerde, o piense mejor, que la chilenidad es mucho más que una empanada, mucho más que un trajecito de huaso o china.
La chilenidad es el valor que nos hace identificarnos con un terruño, con una cultura, una idiosincracia y un país, el mismo que deberíamos amar todo el año, mejorar todo el año, luchar por el todo el año contra todo gil que quiera dañarlo (cof cof, represas), estancarlo ("políticos"), aprovecharse de él (weonaje con poder en general) y hacerlo triste, chaquetero, invivible, desigual.
La educación es solo la primera de las muchas luchas que tendremos que hacer por la dignidad de vivir como nos merecemos, como soñamos y como somos capaces de hacerlo, y es una lucha  que todo chileno que ama su país debe luchar.

Es ese el valor que deberíamos inculcar, por mucho más que un solo mes: el amor a tu país, el deseo y la acción de hacerlo mejor.

Eso... Y pa que nadie se enoje... Viva Chile CTM!



4 comentarios:

  1. Bonus
    Si usté, como yo y no se preocupe, como montoooooooooooones de chilenos, no sabe bailar cueca, acá le dejo una clase muy buena, express

    http://www.youtube.com/watch?v=CzgBSbBovd0

    Disfrútela.

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  2. lo mejor que le podis traspasar a tu hija es la claridad pa ver las cosas y los cojones para pelear por ellas. eso de pelar al pais que te acoge es normal. es de muy mala educacion morder la mano que te da de comer, pero cuando vives afuera te vas a percatar de que es imposible no opinar acerca del extraño (para quien no es parte de) comportamiento de los hueones que te acogieron (tengo atados con mi mina todo el tiempo que hablamos de su tierra jaja) otra cosa. la gente se deja llevar por la propaganda nomas, eso ocurre aqui y en la quebrada del aji. lo aprendi cuando me fui de Chile.

    Ahh, por casualidad te hicieron baby shower pa cuando estabas preñada? piensas disfrazar a tu hija pa jaloguin? o no sigues esos ejemplos pq no son costumbres chilenas? si es asi me saco el sombrero...

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  3. Inevitable, es cierto, yo también pelo a nivel micro, cuando voy a casas de otras personas y no entiendo las costumbres que tienen. Con el tiempo entendí que en realidad es mi familia la rara y no el resto de Chile... Claro que no soy tan vaca de decirlo en la cara de ellos, pa qué?

    Y no me celebraron baby Shower porque no tenía tantas amigas T.T peo yo feliz que me regalaran cuestiones, levante la mano el que no le gusta que le regalen weás (y le mando un Saaaaaaaaaaah)
    Pero si celebro jalogüin con mi cachorra, por dos cosas
    1.- soy simpatizane wicca y celebro a mi manera los sabbath xD (claro que no me empeloto pa primavera, nunca tanto)
    2.- Si yo tuviera su edad, me habría encantado salir a pedir dulces disfrazada de algo.

    A mí las tradiciones no me vuelven loca ni siento que haya que respetarlas como una cosa reverencial, el inquilinato fue una tradición y menos mal que desapareció, por ejemplo.
    Yo prefiero verle el lado bueno: es entretenida, es ludicash y por bajo costo... mucho mas bajo que la navidad que la celebramos con pascueros asados y nadie se queja

    saludos!

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  4. buenísima nota, siempre una buena sorpresa en tu blog.

    P.D: reacciónes: Ta weno, pero más wena estay tu :P

    Besos y abrazos de oso.

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