miércoles, 12 de diciembre de 2012

Viejos culiaos 1

A la Alejandrita, tan simpática ella, no le gustan los viejos. Ni lo niños... ni los adolescentes, ni los pendejos esos sin dientes que puro molestan. Tampoco le gustan mucho los adultos.

O sea, un amor de persona.
Pa que no chillen con "mira la weona es mamá y no le gustan los cabros chicos, bla bla bla" la verdad es que después de tener a mi hija, los niños dejaron de molestarme. Sí me siguen molestando, enormemente, los padres de esos niños insoportables, porque entiendo que el problema ahí es del adulto y no tanto del pendejo, aunque sea más fácil odiarlo a él.
Luego los adultos también dejaron de molestarme porque... emh... ya soy una adulta como ellos. No queda de otra.
Y los jóvenes tbn, porque básicamente me relaciono solo con gente joven, más joven que yo.

Asi que me quedo odiando a los adolescentes... y si vemos los especímenes mi odio (y pánico de pensar que estos wns serán los que dirijan al país cuando yo sea vieja!) está más que justificado.

Y me queda el odio a los ancianos...que no es tanto odio como desagrado. Como el deseo de no llegar a ser como esas viejas de mierda que involucionan y se portan como cabras chicas, le tienen celos a los nietos y wevean por mil. No, antes que me den un balazo o algo por el estilo, en serio.

Y aviso que el odio por los ancianitos no se me va a quitar tan pronto, sobre todo luego de dos interacciones que califico de , a lo menos, rarísimas. Se las voy a contar porque pa llegar acá es que me fui en volá odiosa contra el mundo. Son dos vivenciaas que tuve con un par de viejos, que yo no sé por qué me pasan estas weas a mí... mala cueva, digo yo. Vamos con la primera

¿Me veis care puta?
La primera me pasó hace unos meses, creo que dos (filo). Me quedé cheleando con amigos o no me acuerdo qué me quedé haciendo, pero llegué tarde al terminal y el último bus a Linares se había ido, asi que obligada a esperar los que venían desde Santiago, que según me dijo el encargado de boletería, estaba por pasar.
Media hora después, seguía paseándome por el terminal, escuchando música pa matar el tiempo, cuando veo a un lote de evangélicos al fooondo del terminal, conversando.
Como no tenía nada más que hacer, me fijé en ellos, que de pronto se fueron en masa mientras se despedían de un viejo que quedó sentado en una de las bancas, con una taza de café en sus manos.
Mis pasos (y el destino, no sé) me llevaron hacia esa dirección. Cuando quedé a 3 metros del vejete, veo que levanta la vista con ojos llorosos y dice algo. No escuché ni weva proque iba con audífonos, pero siendo educada en un colegio católico y bla bla, me los saqué para escucharlo.
El viejo me dice más o menso esto:
-Era mi sobrino... me encontró acá (sollozo)... botao..como un perro!...Me dieron café
-Aaah...pucha

Ya, qué weá le dices a alguien en esa situación? me pasé toda la película del pobre viejo, abandonado, solo, un alma  perdida y cosas así. De eso, en todo caso, se ve mucho en las calles...

-¿Y no tiene a dónde ir? Podría intentar ir al Hogar de Cristo- die yo, buena cristiana
-No tengo, mijita...y estoy tan solo! Mi mujer me echó de la casa (sollozo)
-Ah, pucha...
Y ahí me quedé yo parad, pensando o imagiando la triste vida del caballero, que puro sollozaba, emocionado. Entonces me dice:
-¿Sabe? yo tengo plata...
-¿En serio?
-Sí, pero al tengo en el banco...
-Y por qué no va a sacarla y se va a dormir a un lugar bueno? :)
-Noooo, no puedo ir solo...

<<Claro, pensé yo... capaz que se la roben al pobre viejo>>

-Por qué no me acompaña Ud? - me dice el viejo de mierda
-No puedo, me tengo que ir a mi casa.
-Pero quédese conmigo, nos quedamos por ahí y mañana me acompaña a sacar platita al banco y le doy unos billetitos... yo tengo harta plata oiga...
-¿Qué cosa?!!!
-Quédese, acompáñeme, no quiero estar solito.

 Y yo me quedé tan estupefacta, que no supe, no pude, no me atreví a mandarle la chuchá que se merecía, porque en mi perra existencia nadie, pero nadie me había tratado de puta en mi propia cara! Ya pa esas alturas el viejo de mierda había dejado de sollozar y moquear y me miraba las tetas con la mejor cara de hambre que le he visto a alguien, no sé si me dio más asco, risa o rabia la situación. Balbucié una despedida entre cagada de la risa y no creyéndome la weá y me fui lo más lejos que pude. O seea, wn! con cuea se le habrá parado al pobre caballero... y qué onda! no tengo ni cara!!!

Viejo culiao, debí haberte mandado a la chucha de una >.<
Mañana les cuento la otra, que en serio, es peor xD

Chaucha!

2 comentarios:

  1. Viejo ql verde, le faltó su pará de carros al csm xD

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  2. Jajajaja, lo mejor es tomarse esas con humor y no pescar, sino sólo crecerá tu odio contra todo y todos los viejitos, mira que hay algunos que son bastantes tiernos, como en todo, hay de todo.
    ¡Saludos!

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