A mí, insinfinidad de cosas me generan adicción : el PC, juegos de PC, internet, series de TV, el cigarro, la comida, las malas relaciones...
Como ando en la volá de replantearme mi vida (quién soy?, pa donde voy?, que me pongo hoy?) ayer hablando con mi ex (al que pronto bautizaré con otro nombre, pa efectos del blog, porque es lata decirle todo el rato "ex", aunque lo sea) y él volvió a dar la charla antitabaco, con argumentos que no tiene pa qué darme, porque sé que hace mal, sé que es un gastadero inútil de plata y mi parte devota de la virgen del puño lo sabe también; sé que soy asmática y sí he tenido cañas de cigarro y la cuchara martillándome lo peshoh por solo caminar una cuadra.. lo seeeeeeeeeee...
Y entonces, ¿Por qué cresta soy adicta?
Porque ésa es la pregunta clave, porque yo no creo que mis adicciones sean el problema, son solo el reflejo del problema, el asunto es descubrir cuál y por qué mi cabecita no quiere enfrentarlo y prefiere sublimarlo en otras weas. Tonces, pa efectos sicológicos, tendría que volver a mi tiernísima infancia, porque según los sicólogos, acá se gestan los traumas y cuanta wea te hará salir a matar gente cuando wailón o ser un ciudadano aporte a la sociedá.
Y así, pensando y chanteándome a mí misma con mis super teorías, he llegado a la conclusión que mi etapa oral no se completó.
(Típico que cuando he dicho mi teoría en frente de personas y hay un weón (dícese, hombre), el weón pega un respingo)
Además mi destete fue traumático pa mí... en aquella época la salud de los cabros chicos pasaba por quitarles el pecho sí o sí a los 9 meses, así quisiera el pendejo o no... mi vieja recuerda con espanto cómo ella retaba a las pobres mamás que intentaban explicarle que la guagua no quería soltar la leche materna por nada y mi vieja les tiraba encima el discurso avalado por quizás qué viejo weeta que era lo mejor pal niño y weas...Hoy, en cambio, ojalá que el cabro chico siga mamando hasta que le de hipo.. e incluso hay mamás que defienden el derecho a seguir amamantando hasta los 4 años.. a mí, no me pregunten por qué, me da asco imaginarme a un mocoso de 4 años amamantando.. yuk!
Bueno,retomando, como en aquella época era malo y mi madre una representante de la salud ( y entre otras weas, no quería comer y empecé a bajar de peso),se acabó la leche materna como a los 9 meses, y como Alejandrita era desde ya una guagua porfiada, no quiso dejarla, se negó a comer otras cosas y pasé dos días llorando, sin querer recibir nada que no fuera leche de mi mami, sin dejar dormir a nadie en la casa y sin subir un gramo de peso...
Eventualmente me rendí, maté chorrocientas neuronas en el proceso y (acá viene la teoría) me quedé con la pena enorme de sentir que mi mami me había abandonado ( sñig!).
Con el tiempo la relación con mi vieja tuvo más problemas y desencuentros y aunque hoy por hoy estamos mejorando(GRAN parte del mérito es mío, y lo digo sin asco), en más de alguna ocasión me sentí solita, dejada de lado o simplemente extraña en mi familia, entre mis amigos y en el ambiente en general,
Toos pa usté, mi reina
Eeeeeentonces busqué otras alternativas pa sentirme aceptada ycharán!!--> Adicción
Ya bueno, la wea es que todas las cosas a las que soy adicta, responden a una necesidad de pertenencia. El cigarro, por ejemplo, simplemente se me hizo necesario cuando llegué a mi actual carrera, donde todo el mundo fuma, wn la cagó, como que no se concibe veterinario que no fume apenas pueda, después de almuerzo o con café en la mano... y mi mente de guagüita de 9 meses (aaawnn..) entendió que pa ser parte del grupo (o sea, no ser abandonada) había que fumar...
Ven?? si Freud es un vejete obsoleto al lado mío po, no diremos que toda la base de mi teoría viene de él, pa poder sobrarme en paz, pero soy seca!
Así que de eso hablaba con mi ex anoche, porque si de algo me ha servido haber terminado con él (sñig!) ha sido pa pensar en mí el doble que antes, analizar mi persona, mi personalidad y las weas que hago y he hecho, sobre todo analizar mis errores como persona, como pareja, como estudiante y profesional.. o sea, me he estado criticando hace un mes brígidamente, porque hasta yo me aburría de la mina en la que me había convertido.. adivinen... por no dejar de pertenecer.
En fin, ahora tengo caña de cigarro, y eso que me fumé solo dos, tengo los dedos pasados a cigarro y me revuelve la guatita olerlos y tengo una teoría que comprobar y un problema que arreglar:
Antes de pertenecer al grupo, debo pertenecerme a mí, delinearme, definirme y poner los límites de mi persona/personalidad.
Antes de volver a buscar a toda costa crear un núcleo, tengo que aprender a crear el mío...tengo que dejar de ser adicta a pertenecer.
(Qué lindo final, ah? y no me costó nada darle ese sentido profundo del tipo final de teleserie... tiembla Abreu!)
Bueno, ahora sí el gran final: shausha!
Lindas reflexiones jajaja, siento que nos parecemos harto en muchas cosas.
ResponderEliminarSigo pensando que nos conocimos por que ambos teníamos necesidades parecidas y nos parecíamos en muchas cosas.
Te dejo un beso, buenas noches y descansa.
Los que tenemos alma de adictos podremos ser patéticos, débiles y autodestructivos pero al menos no somos tan aburridos como los que no son adictos a nada.
ResponderEliminarEs cierto lo de las "redes sociales". Antes las habitábamos seres depresivos y perdedores y ahora se llenó de gente "divertida", "inteligente", "culta", "festiva", "responsable" y "ecológica" (sí, todo eso junto y con las comillas incluidas). Siento algo de náuseas.
Gran entrada. Para poder leer cosas tan honestas como ésta se inventaron los blogs.
Saludos!
Muy cierto Rael, al menos tenemos una particularidad, tóxica, pero alguna gracia... y a la hora de hacernos regalos, pucha que le facilitamos la vida al otro! Un cenicero, un pucho, un encendedor, cualquier tontera de esas pa un adicto es personal... a un ser sin adicciones lo deben tapar a chocolates o calcetines xD
ResponderEliminarGracias pro pasarte, eres el primero! :O